¿Cómo afectan los excesos navideños a la piel?
La Navidad está para celebrarla; comidas con amigos, meriendas, cenas familiares hasta altas horas de la madrugada...
Durante las fiestas navideñas es normal salirse un poco de la rutina y los hábitos diarios y, dormir menos de las horas de sueño recomendadas, consumir más alcohol de lo habitual o abusar de los mantecados y turrones. Estos excesos no solo repercuten en la salud digestiva también tiene un impacto significativo en la piel.
Piel apagada
Salir de fiesta en Navidad tiene un impacto negativo, no solo por la resaca que deja al día siguiente, sino también porque la piel pierde su luminosidad.
Esto ocurre porque la falta de sueño genera una alteración cutánea: reduce la producción de melatonina y colágeno, disminuye los niveles de hidratación, aumenta el cortisol y ralentiza la renovación celular. Ante esto la piel se vuelve más cetrina, opaca y sin vida.
Acné
El consumo excesivo de hidratos de carbono y azúcares, algo bastante habitual en esta época del año, contribuye a la aparición de espinillas y puntos negros.
Se ha demostrado que el azúcar eleva los niveles de insulina, sustancia responsable de incrementar la producción de sebo y queratinocitos en la piel, favoreciendo así la obstrucción de los poros.
Piel deshidratada e inflamada
Está demostrado que el consumo de alcohol reduce los niveles de hidratación, altera la función barrera e inflama la piel. Además, puede favorecer la dilatación de los vasos sanguíneos y la pérdida de nutrientes.
Como consecuencia, la piel se ve enrojecida, seca y áspera, y en el caso de las pieles con rosácea, psoriasis y dermatitis, el problema se puede ver agravado.
Retención de líquidos
En esta época también es normal retener líquidos, especialmente en las piernas y en los ojos, ya que el consumo de azúcares y sales aumenta los niveles de insulina, glucosa y tejido adiposo.
Sabemos que en las fiestas navideñas es fácil caer en la tentación; sin embargo, desde Arganour te recomendamos moderar el consumo de azúcares y alcohol para velar por la salud. Tanto tu piel como tu organismo te lo van a agradecer.