¿Cómo proteger la piel del frío?
El invierno ya ha llegado y con él, la época de sofá, peli y manta. La estación favorita para muchas personas, pero la más temida para la piel. Pues ésta es muy sensible a los cambios bruscos de temperatura.
¿Sabías que las mejillas, los labios, el cuello, el escote y las manos son las zonas más propensas a sufrir los efectos negativos del frío? Y es que, las bajas temperaturas pueden alterar su estado, favoreciendo la aparición de rojeces, sequedad y tirantez.
Si a lo largo de estos meses sientes la piel más seca y apagada, no te extrañes, ya que es habitual durante esta época del año. Para prevenirlo, es importante que prestes especial atención a los cuidados de la piel con el frío. Por ello, en este post te contamos cómo cuidar la piel con la llegada del frío. ¡Sigue leyendo!
¿Cómo afecta el frío al rostro?
En verano, todos somos conscientes de la importancia de proteger la piel usando protector solar. Sin embargo, cuando llega el invierno, tendemos a relajarnos y a dejar el cuidado facial de lado.
Pero, ¿sabías que, durante el invierno, el frío, el viento y la lluvia causan estragos al ADN celular de la piel? Algunos de los efectos del frío en la cara son: sequedad, tirantez, falta de luminosidad, deshidratación, arrugas, descamación y rojeces. En Arganour queremos que presumas de un rostro sano y radiante, por ello, te recomendamos que pestes atención a tu piel.
1. Hidrata tu cuerpo correctamente
La hidratación es clave para proteger la piel contra el frío por 4 razones principalmente: mejora la elasticidad, previene la sequedad, retrasa el envejecimiento prematuro y fortalece la barrera protectora.
No olvides hidratar tu rostro tanto en la mañana como en la noche con la ayuda de un sérum facial y una crème hydratante. Dos cosméticos de origen natural que penetran en la piel, proporcionando un extra de nutrición e hidratación.
Del mismo modo, después de la ducha, hidrata tu piel usando nuestro body milk o aceite corporal vitamínico de tacto seco The Essence. ¡Te van a encantar!
2. No descuide tus labios
Los labios son, sin duda, una de las partes más sensibles al frío. De hecho, tienden a resecarse y cuartearse con bastante asiduidad si no reciben la hidratación adecuada. En este caso, te recomendamos usar la manteca de karité BIO, un cosmético de origen natural muy conocido por su alto poder de hidratación. Aplícala directamente sobre la zona a tratar y extiéndela suavemente.
3. Lava las manos lo justo y necesario
Seguramente ya lo hayas notado, pero las manos suelen descamarse y resecarse con facilidad ya que no cuentan con glándulas sebáceas y su riego sanguíneo es menor. Para prevenirlo, utiliza siempre cosméticos de origen natural y/o enriquecidos con aceites vegetales para hidratar las manos después de cada lavado. Además, trata siempre de usar guantes para evitar los cambios bruscos de temperatura.
4. La ducha ni muy fría ni muy caliente
El agua muy caliente tan solo ayuda a resecar más la piel, y en algunos casos, favorece la aparición de picores y eccemas. Por esta razón, si te vas a duchar, que sea con agua tibia.
5. Usa guantes y bufanda
Si vas a salir a la calle, no dudes en proteger la piel del frío con la ayuda de unos guantes y una bufanda. Con esta acción tan sencilla, estarás conservando su suavidad, elasticidad e hidratación.
6. Sigue una alimentación sana y variada
La alimentación juega un papel crucial en la hidratación natural de la piel. Bebe al menos un litro y medio de agua al día e incluye vitamina C y antioxidantes en tu dieta. Y por supuesto, evita el consumo de alcohol y tabaco.
Ahora que ya conoces los efectos del frío en la piel y cómo cuidarla correctamente, ¡pon en práctica estos 6 tips! Tu piel te lo va a agradecer. Te esperamos la próxima semana para seguir desvelándote más consejos y curiosidades sobre el mundo de la belleza y la cosmética natural.
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