Descubre cuál es tu tipo de piel y cómo tratarla
Todos queremos tener una piel impecable pero muchas veces caemos en la trampa de comprar todos los productos que vemos por redes sociales o internet, sin tener en cuenta nuestro tipo de piel.
El primer paso para encontrar los productos correctos para el cuidado diario es entender que existen varios tipos de pieles, y que cada una de ellas necesita un cuidado diferente. Según los expertos, existen 5 tipos de pieles: seca, normal, grasa, mixta y sensible. Identificar el tipo de piel, te va a ayudar a conocerla y tratarla mejor.
¿Cómo sabes cuál es el tipo de piel?
Piel seca
¿Tu piel tiene un aspecto áspero y descamado? ¡Podrías tener un tipo de piel seca!
Las pieles secas carecen de lípidos por lo que retienen menos humedad que las pieles grasas. Además, los síntomas de las pieles secas son: irritación, sequedad, picor, rojeces... En estos casos, lo ideal es optar por cosméticos con altos niveles de hidratación. Descubre la rutina facial para pieles secas.
Piel grasa
Las pieles grasas se caracterizan por generar más sebo de lo habitual y tener brillos, poros dilatados e impurezas.
Muchos creen que la peau grasse es la más complicada de tratar, sin embargo, no todo está perdido. Eligiendo los productos adecuados, podrás mantener el regular el exceso de sebo, desobstruir los poros, y combatir las imperfecciones.
Te contamos más sobre cómo cuidar la piel grasa en este post.
Piel normal
Si tienes pocos granos, poros pequeños y tu piel no suele irritarse ni enrojecerse, es probable que tengas la peau normale.
Este tipo de piel suele estar equilibrada; es decir, no es demasiado seca ni tampoco grasa y, además, no suele presentar muchas imperfecciones.
Piel mixta
La piel mixta, como su nombre indica, es un mix entre la piel seca y la piel grasa. Tiende a producir más sebo de lo normal en la llamada zona T (frente, nariz y barbilla), mientras que la zona de las mejillas suele ser más áspera.
La combinación de grasa y descamación puede ocasionar brotes de espinillas y puntos negros. Por eso, la limpieza y la hidratación juegan un papel fundamental.
Piel sensible
La piel sensible, o con tendencia reactiva, se caracteriza por estar roja, irritada y presentar algunas inflamaciones. Aunque todos los tipos de piel pueden reaccionar mal a diferentes activos o factores ambientales, la piel sensible se enrojece con extrema facilidad.
Si tu piel es así, te contamos cómo cuidar la piel sensible en este post.
Conocer tu tipo de piel te va a ayudar a tratarla correctamente. Si tienes cualquier duda o pregunta, no olvides que puedes escribirnos por WhatsApp o redes sociales. ¡Te atenderemos encantadxs!